Lucca es una preciosa ciudad de la Toscana. Está totalmente amurallada, y es fuente inagotable para la fotografía. Pero lo que casi nadie refleja son las muy numerosas “pintadas” que cabe encontrar en los pasadizos que hay que atravesar para entrar en el recinto amurallado.
Aquí se pueden encontrar todo tipo de expresiones, desde las que manifiestan de manera descarnada lo peor de la vida, hasta que expresan sintéticamente lo más sublime, que sin duda es el amor. La vida misma, en toda su crudeza, en su más directa espontaneidad, en todo su esplendor. He creado este collage con dos buenos ejemplos... Seguro que todos alguna vez hemos dicho lo uno y lo otro. Creo que no hace falta traducción.