Un tríptico a modo de curiosidad, otras pocas más de las muchas que suelo hacer cuando un escenario me gusta y puedo pararme un rato.
Cada imagen, de forma individual, puede resultar sosa; incluso puede parecer un fondo, sin más. Como si vas al teatro, miras un rato el escenario y te vas sin ver representar la obra. A mí me pasa mucho eso en fotografía con los paisajes, aunque ya sé que es cosa mía, como que me falta muchas veces algo, más allá de las saturaciones y los tonos pastel o los contrastes.
En este caso, las tres juntas, pues para mí es otra cosita, es algo visualmente que puede hacer que se pare unos segundos el espectador. Si acaso, sólo porque la imagen la componen tres fotografías en lugar de una y hay más cosas que mirar
Salvando las distancias con ésta, si habéis echado un vistazo a los seleccionados de muchos concursos nacionales, de vez en cuando aparece alguna serie de este tipo, jugando con las líneas, las formas o el color