Anoche cuando me recogía y apenas treinta metros de casa localicé a unos cinco o seis metros del suelo de una zona muy transitada con este ejemplar de Búho Chico. Sobre un grueso cable de acero que le servía de atalaya escudriñaba el horizonte en busca, supongo, de algún bicho que echarse al buche. Mi hijos y yo intentamos tomarle alguna foto con los móviles. Imposible. Pero como parecía cómodo en su posadero me apresuré a llegar a casa y agarrar la cámara. Tras varios intentos fallidos, ya que no me hacía caso a pesar de que le chistaba una y otra vez, al final pude hacerle un de cara cuando me miró con sus grandes ojos, el flash hizo el resto y me regaló esta foto un tanto ¿fantasmagórica? y que no quise estropear/corregir.
Ah, lo del marco es una licencia que me he permitido y que espero que agrade.