Segundo año consecutivo que hacíamos esta ruta y, la verdad, el premio fue todavía mayor que la vez pasada ya que pudimos disfrutar de una mejor luz, con independencia de la mejor o peor ejecución de la foto. De las más bellas que he podido hacer. 1.100 metros de subida, dura por larga, unos 14 km., desde 1.600 metros hasta 2.700 metros y porque, en definitiva, los metros se acumulan en las piernas.
El Sulzenausee es el "punto final del camino", el lago que recibe las aguas del deshielo de los glaciares que tiene sobre él, el Sulzenauferner y el Stubaier Gletscher, la cima de Tirol, aunque no de Austria. Seguramente no será mi mejor foto de los últimos meses pero la carga subjetiva que tuvo cuando la hice supone que para mi sí lo sea, o al menos la que más me emocionó. Por el esfuerzo en llegar, por lo maravilloso del lugar, por la espera hasta que la luz fue todo lo adecuada que podía ser para el momento, y por la adrenalina producida cuando corría y saltaba sobre piedras en busca del encuadre antes de que el sol se ocultase por un buen tiempo tras una nube. Empezaba a ser tarde y había que bajar, no podíamos esperar más.
Sulzenausee
by
Roberto Alcain
, en Flickr