En defensa de los formatos apaisados se suele decir que son más naturales por cuanto que se asemejan mejor a la vista humana porque, obviamente, nuestros ojos está colocados en horizontal y no en vertical, algo muy determinante para los cineastas, los videógrafos o las televisiones que se las ven y se las desean para reproducir los videos “verticales” que les llegan tomados por manos inexpertas con los móviles. Pero en fotografía esto no es así, en absoluto. Nuestras tomas fotográficas no tienen esos impedimentos.
Es verdad que el Naranjo de Bulnes, en esta magnífica toma que nos muestras, se aprecia de forma más imponente en vertical, que incluso lo sería aún más si te hubiera sido posible acercarte y tomarle la perspectiva en contrapicado con una focal más angular. Ansel Adams, el maestro de los maestros, tiene muchas tomas verticales de los grandes macizos rocosos del valle de Yosemite, así como de grandes especies arbóreas y otros temas en los que predomina la vertical. Yo creo que el formato debe adecuarse al motivo que es el que determina el encuadre.